Tras dejar su vida en La Plata, recorren el país en bicicleta impulsando Argentina dibuja, un proyecto itinerante que brinda talleres de arte gratuitos a niños
A veces el rumbo de la vida depende de un simple impulso. Así le ocurrió a Romina y Richard, quienes decidieron cambiar la rutina en la ciudad de La Plata para dedicarse al cicloturismo y poner en marcha un proyecto que busca unir el país de norte a sur: Argentina dibuja, una iniciativa que brinda talleres de arte gratuitos a la comunidad.
“Básicamente, con mi compañero largamos todo y nos mandamos a viajar. Fue animarnos a viajar como un estilo de vida; nos cambió la rutina y nuestra forma de vivir”, confesó Romina Risueño a El Editor Platense. Profesora de Artes Plásticas, Educación Física y psicomotricista, desde hace diez meses recorre distintos puntos del país en bicicleta junto a su pareja.
Según relató, la decisión llegó después de unas vacaciones, cuando se animaron a dar un giro de 180 grados y dejar atrás gran parte de su rutina en la capital bonaerense. Desde entonces, viven viajando y sostienen su modo de vida a partir de ahorros y de trabajos que van surgiendo a lo largo del recorrido.
Richard, su compañero, es maestro calderero y trabajó durante gran parte de su vida en el Astillero Río Santiago. Además, es músico y tecladista. “Más allá de las profesiones que teníamos allá, con todas las herramientas y habilidades que poseemos, nos largamos a la ruta”, explicó Romina.
Sin embargo, al conocer otros espacios y comunidades, la artista advirtió que no podía dejar de lado una parte central de su trayectoria. “A nuestro viaje le agregamos un plus, un propósito. En La Plata tuve durante diez años un taller de arte que era el único espacio inclusivo, tanto para disidencias como para personas con discapacidad. Al salir a viajar, todo tomó otro formato y me di cuenta de que no podía dejar de dar clases”, se sinceró.
Así nació Argentina dibuja, un taller de arte gratuito destinado principalmente a las infancias de cada lugar que visitan. En muchos casos, tratase de parajes o pueblos donde no es habitual contar con actividades extracurriculares para niños y niñas.
“Vamos por los pueblos que vamos conociendo, donde llegamos a puro pulmón y pedal, compartiendo talleres gratuitos para las infancias locales”, detalló Romina sobre la propuesta. Debido a su forma de vida itinerante, decidió ampliar el proyecto y solicitar la colaboración de la comunidad a través de redes sociales para poder adquirir materiales.
“Puede parecer ambicioso y muchas veces es difícil de sostener, pero es un granito de arena. Los dos venimos de muy abajo y creemos que se trata de generar oportunidades donde no las hay. Algo tan simple como un taller de dibujo o de arte puede ser un estímulo enorme para una personita que vive en un lugar donde no tiene acceso a ese tipo de espacios”, reflexionó.
Finalmente, la pareja dejó un mensaje para quienes atraviesan momentos de incertidumbre. “Más allá de cualquier ideología, sabemos que está todo muy complicado. Lo vemos en la gente y lo vivenciábamos allá: los dos trabajábamos todo el día para llegar a fin de mes. Eso fue lo que nos movilizó a partir”, señaló Romina.
Y concluyó: “No necesitás vivir viajando para encontrar espacios sanos o momentos lindos en la naturaleza. Si están pensando en cambiar de vida, que se animen. Siempre que sea algo que les haga bien”.
Alias: LAPIZ.DIBUJA.LINEA
A nombre de Romina M. Risueño
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