En la segunda fecha de la Copa de la Liga, Estudiantes de La Plata cayó por 3-1 frente a Unión de Santa Fe y no pudo sumar en condición de local. Pensando en el partido del martes, Eduardo Domínguez paró un equipo alternativo que mostró un bajo nivel en el Estadio Hirschi.
Una de las novedades fue la vuelta de Federico Fernández, quien hizo su primera aparición con el manto albirrojo. El marcador central compartió zaga con varios juveniles y estuvo a la altura en un encuentro de puntos bajos.
El Pájaro volvió a jugar luego de más de tres meses fuera de las canchas. Su último partido antes de quedar libre en Qatar fue el triunfo del Al-Duhail ante Al-Shamal que les dio el título local en la última jornada del certamen.
Fede se mostró sólido pese al largo periodo de inactividad que llevaba. En cuanto a los datos, completó 44 pases de 47 que intentó (94% de efectividad), las cinco pelotas largas que jugó llegaron a destino, ganó el único duelo en el suelo que disputó y realizó cinco despejes.
De esta forma, fue el punto más alto de una defensa (y un equipo) que dejó mucho que desear. Así, Fernández comenzó a tomar ritmo y se convirtió en una opción para el entrenador.