Durante el primer trimestre del año se registraron 18 millones de pobres y 4 millones de indigentes en Argentina, según los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). A pesar del crecimiento de la actividad económica y la recuperación del empleo, el índice de pobreza también se mantiene en escalada.
De acuerdo a los microdatos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) publicados este viernes, al mes de marzo la indigencia subió del 8,2% al 8,9% mientras que la pobreza del 34,2% al 38,7%. Los argumentos expresan que el salto se da a raíz de la galopante inflación que llegó a 115% acumulado en los últimos 12 meses.
Tanto la pobreza como la indigencia se calculan en torno a la evolución de la Canasta Básica Alimentaria y la Canasta Básica Total que, de acuerdo a datos oficiales del INDEC, aumentaron más que la inflación. A marzo, la línea de indigencia pegó un salto del 120,1% interanual, la de pobreza 113,2% y la inflación en 104,3%, lo que dejó como saldo 2 millones de nuevos pobres.
Además, explican expertos, Argentina registró un empobrecimiento inédito de los trabajadores ocupados en todas las modalidades laborales (registrados y no registrados) y los cuentapropistas donde la pobreza subió del 24,4% al 28,7%.