Lula da Silva aumentó ayer los impuestos a los súper ricos y apuntó a los capitales offshore. La norma provisional fue firmada por el presidente, quien envió un proyecto de ley al congreso que "tributa sobre el capital de residentes brasileños aplicado en paraísos fiscales”.
“Pongamos a los ricos en el impuesto sobre la renta y a los pobres en el presupuesto. Eso es lo que hicimos ayer, al sancionar la ley de apreciación del salario mínimo y proponer la Medida Provisional para gravar a los superricos”, escribió Lula en sus redes.
Además, también explicó que los pobres son los que pagan más impuestos a la renta que “el dueño de un banco”. Una vez enviada, los legisladores tienen 120 días para la aprobación, o de lo contrario, la norma perderá efecto.
El Gobierno con estas medidas busca fortalecer las arcas públicas y reducir el déficit fiscal a cero el año próximo. La medida sobre los fondos, que en general son individuales, prevé "un cobro de 15 a 22,5%" sobre los rendimientos.