En la ciudad de San Andrés de Giles, a unos 159 km de
distancia de La Plata, y en donde habitan unas 22.257 personas, gobierna desde
el año 2021 Miguel Ángel Gesualdi, el hombre que desembarcó en política durante
la gestión del exintendente Luis Ghione, cuando fue Tesorero Municipal.
Ya en la gestión de Carlos Puglelli, el ahora mandatario
local se desempeñó como Secretario de Coordinación, Planeamiento y Control de
Gestión. En tanto, finalmente, en el año 2019 encabezó la lista de concejales
junto a Puglelli quien triunfó en los comicios, pero siguió en el Ejecutivo.
En tanto, en las elecciones de 2021, Puglelli se presentó
como candidato a diputado provincial y fue electo. De esta forma, por la Ley
orgánica de municipalidades, y haber sido primer candidato a concejal en 2019,
le correspondía a Gesualdi reemplazar al intendente desde diciembre de 2021.
En tanto, en las elecciones del año 2023, ganó la
intendencia al presentarse con la lista de Unión por la Patria, con quien
consiguió el 47,39% contra 29,44% de la candidata de Juntos por el Cambio,
María Mercedes Condesse.
Actualmente el jefe comunal, que además pertenece al Frente
Renovador, en cada encuentro con la prensa se toma unos minutos para cuestionar
duramente al presidente Javier Milei, quien venció a su líder político Sergio
Massa en las últimas elecciones presidenciales, y aseguró: “terminó haciendo
todo lo que advertimos que haría”.
En ese aspecto, en el mes de octubre se refirió a través de
redes sobre la situación económica que atraviesa el país y compartió un cuadro
comparativo entre el acumulado de la gestión Massa y el acumulado de Milei
desde diciembre hasta septiembre, lo que arrojó un resultado de 113,33% de
inflación acumulada para Massa y un 152,73% para Milei.
Con la seguridad como eje central
Al igual que hizo durante su primer mandato, que comenzó en
el 2021, Gesualdi se encarga de mantener la cuestión de la seguridad de los
vecinos como uno de los ejes centrales de su gestión.
En ese aspecto, hace unos meses el intendente se reunió con
el director provincial de la Subsecretaría de Articulación Institucional para
la Seguridad, Martín Torres; el Coordinador Provincial Seguridad Rural, Adrián
Pereyra; el Superintendente de Seguridad Rural, Walter Fernández Mamani; y el
Coordinador de Seguridad Rural de Chivilcoy, comisario Maximiliano Tonelo.
En dicha reunión se trabajó con el fin de llevar adelante
políticas en materia de prevención y se solicitó mayor cantidad de policías,
sumando personal de la comisaría Local y del Destacamento Seguridad Vial.
Además se expusieron los temas que inquietan a la comunidad,
con el compromiso de abordar de manera urgente la problemática referida a la
seguridad, personal policial, móviles y la incorporación de drones dependientes
al Ministerio de Seguridad Provincial.
Obras y presupuesto
Pese a lo hecho, el intendente fue objeto de críticas en el
último tiempo por el mal estado de algunos caminos rurales, situación que hizo
que el mandatario tuviera que salir a hablar y exponer la falta de dinero para
los trabajos.
“Tenemos que hablar de todo: en lo que respecta a servicios
rurales, el año pasado se proyectó $238 millones que deberían haber ingresado
por esa tasa y solamente se abonó del sector agropecuario 89 millones, es decir
que solamente pagaron el 35% de servicios rurales, cuando el municipio gastó
105 millones en reparación de caminos, o sea que el municipio gastó 20 millones
más de lo que cobró, hubo un desfase de 20 millones por el bajo pago de los
servicios rurales”, dijo el hombre.
Además Gesualdi habló sobre la falta de recursos municipales
y apuntó contra la oposición: “El año pasado no hubo actualización de tasas.
Este año estamos llegando a junio y no hay tampoco actualización de tasas,
porque están en análisis y la oposición ha dilatado el tratamiento de la fiscal
impositiva. Al final nos termina perjudicando al municipio por no tener
capacidad para la compra de materiales y para hacerse cargo de esos trabajos”.
También el intendente planteó la falta de maquinarias y
motoniveladoras del municipio, que son antiguas y están rotas por el normal
uso. Por eso, propuso ante la Sociedad Rural la posibilidad de trabajar en
conjunto para resolver esta demanda: “Algún agropecuario que posea máquina
puede aportarla y nosotros aportamos el combustible, le estamos buscando la
vuelta”.