El Gobierno nacional puso bajo análisis programas sociales, del sector de ciencia y tecnología, que se les pagaba a universidades, fundaciones, agrupaciones piqueteras y otras entidades vinculadas al kirchnerismo, por un monto total de $1.867 millones. Así lo estableció una resolución que fue publicada en el Boletín Oficial, en la que también se incluyó la exigencia de devolver los fondos, en caso de detectarse irregularidades o falta de rendición de cuentas.
De acuerdo a lo revelado por voceros oficiales, son los programas que se habían creado en la gestión anterior de Alberto Fernández dentro del ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
En la Resolución 2025/10 se deja constancia de que la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología decidió evaluar la continuidad de aquellos programas y actividades que no cumplen con el grado de pertinencia y aporte efectivo al desarrollo de la ciencia y la tecnología en Argentina. Están relacionados con entidades ligadas a la economía popular que orientaban líderes piqueteros como Juan Grabois y Emilio Pérsico y de universidades como las de Buenos Aires, Lanús, La Plata y la Asociación Civil Abuelas de Plaza de Mayo.
En el Gobierno afirman que “los programas a eliminar serán los que deban rendiciones, que estén vencidos y no aporten al crecimiento del país”. La medida se relaciona con “la necesidad de reorientar las políticas de Ciencia a la generación de conocimiento y el desarrollo de tecnologías al servicio del crecimiento económico y estratégico del país, haciendo foco en: agroindustria, energía y minería, economía del conocimiento, innovación y salud”.
Programas afectados
Un total de 70 programas están siendo evaluados, de los cuales algunos ya han sido identificados para su eliminación. Aunque estos ejemplos no representan el monto total de los recursos involucrados, corresponden a una parte de los programas que ya tienen definida su baja, mientras que el resto continúa en proceso de evaluación.
Uno de los principales programas que será eliminado es Juventudes en Ciencia y Tecnología, diseñado para fomentar la participación de jóvenes de entre 16 y 40 años en actividades científicas. Este programa buscaba desarrollar contenidos de comunicación científico-tecnológica en formatos no convencionales, promover actividades que orientaran vocaciones científicas y facilitar la cooperación interdisciplinaria con organismos públicos y privados.
Se dividía en dos iniciativas principales. La primera era Proyectos de fortalecimiento y creación de clubes de ciencia y clubes digitales, cuyo objetivo era desarrollar espacios recreativos y educativos para realizar actividades relacionadas con la ciencia y la tecnología. Entre los proyectos adjudicados y que fueron dados de baja se destacan el Club PEÑI ANTU MAPU en La Pampa, con un monto adjudicado de $950.000; el Club SE-PA-RA la Basura en Chaco, con un monto igual; y el Club Misterios de la Ciencia en Chubut, con un monto adjudicado de $939.173.
La segunda iniciativa, denominada Ciencia por contar, buscaba fomentar la divulgación científica desde la perspectiva de las juventudes, utilizando formatos no tradicionales. Entre los proyectos adjudicados y cancelados se incluyen Tecnoriginaria: Saberes de los Pueblos Originarios en Salta y Curar el monte: restauración ecológica de la Reserva Guaraní en Misiones, ambos con un monto adjudicado de $350.000. También figura el proyecto Efemérides de Historia Obrera Laufer en CABA, con un monto adjudicado de $210.000.
Sin embargo, ambas actividades presentaban superposiciones con otras iniciativas desarrolladas por distintas áreas dentro del ex Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, lo que motivó su eliminación.
Según el análisis oficial, la medida que da de baja a estos dos programas, “Proyectos de fortalecimiento y creación de clubes de ciencia y clubes digitales” y “Ciencia por contar”, permitirá un ahorro de $72 millones.
El Programa de Subsidios Institucionales, que financiaba el sostenimiento de instituciones no estatales sin fines de lucro dedicadas a la investigación científica y tecnológica, también será dado de baja. Este programa destinaba fondos públicos para cubrir gastos operativos, salarios, mantenimiento y alquileres de estas instituciones. En 2023, se otorgó en promedio $1.300.000 a organizaciones como el Centro de Investigación de la Cultura de Izquierdas en Argentina, para cubrir gastos de funcionamiento, incluidos luz, gas, salarios, servicios administrativos, alquileres, mantenimiento, seguros y vigilancia. Su eliminación representará un ahorro de $36.849.830.
El Programa de Subsidios Extraordinarios, diseñado para cubrir gastos imprevistos en actividades científicas, será eliminado tras detectarse que muchos de los subsidios otorgados no cumplían con los criterios de imprevisibilidad que justificaban su existencia. Entre los beneficiarios de este programa se encuentran la Asociación Civil Abuelas de Plaza de Mayo, que recibió $39.955.000 para el diseño museográfico de la Casa por la Identidad; la Universidad Nacional de La Plata, que obtuvo $42.620.000 para una muestra cultural; y la Universidad de Buenos Aires (UBA), que recibió dos desembolsos, uno de $33.179.949 y otro de $57.834.090.
En total, según informó el Gobierno, la eliminación de este programa de subsidios extraordinarios les permitirá un ahorro de $491.600.101.
Los Proyectos de Cultura Científica, cuyo objetivo era desarrollar actividades para evidenciar el valor social de la ciencia y la tecnología en todo el país mediante iniciativas de carácter asociativo e interinstitucional, también serán eliminados. Esta decisión responde a la existencia de canales y programas ya establecidos que, para criterio oficial, se superponían con estas iniciativas.
Este programa financiaba actividades promovidas por universidades, asociaciones civiles, museos y dependencias gubernamentales. Algunos ejemplos incluyen Abremate ida y vuelta, adjudicado a la Universidad Nacional de Lanús por $1.000.000; Derribando mitos de la sociedad argentina desde una perspectiva sociológica, que recibió $2.992.353 en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA; y Con(s) ciencia teatral, que obtuvo $1.863.500 a través de la Fundación Tati, arte y cultura en Tucumán. Su eliminación, informaron, permitirá un ahorro de $67 millones.