Desde ya hace varios meses el nombre de Foster Gillett empezó a hacerse cotidiano entre los fanáticos de Estudiantes de La Plata, con un acuerdo que todavía no fue puesto a consideración por parte de la masa societaria, y hasta con una comisión directiva que está buscando llegar a un consenso.
Más allá de que todo está por verse, el magnate estadounidense ya empezó a influir en el mundo pincharrata, primero con la decisión de llevar a Cristian Medina a jugar al León, aunque luego tomó una decisión aún más fuerte.
Según a las fuentes consultadas por El Editor Platense, el empresario otorgó un préstamo de 10 millones de dólares a la institución presidida por Juan Sebastián Verón para poder afrontar el mercado de pases. El mismo debe devolverse en dos años y con una tasa de interés baja, pero lógicamente la situación generó opiniones cruzadas, preguntando si era necesario dar este paso.
El propio Verón sostuvo que en febrero se llevará a cabo una Asamblea Extraordinaria y también trascendió que el detalle del contrato comercial con Gillett llegará a los socios en un corto plazo. Lo que más inquieta a los hinchas es la denominada letra chica, con una unión que sería por 30 años y con una tasa de ganancia de 80 - 20 en favor del estadounidense.
Todo está por verse, lo que está claro es que el mandatario albirrojo entiende que el futuro para Estudiantes debe tener este acuerdo y busca que algunos pares de la dirigencia, como también los hinchas acompañen esta idea, tratando principalmente de que el Pincha pueda crecer en infraestructura, más allá del objetivo futbolístico de clasificar al próximo Mundial de Clubes.