Iñaki Berterretche supo brillar con Cambaceres, lo que le permitió dar el salto a Europa. De nuevo en el país, busca dar un paso más en su carrera
Iñaki Berterretche (25) dejó un gran recuerdo en la mente de los fanáticos de Defensores de Cambaceres, que supieron disfrutar de un lateral derecho que se encontraba seguido con el gol y que era infranqueable en la defensa. Hoy, lejos del Rojo, volvió al país luego de una gran experiencia en el fútbol de Europa.
El defensor con pasado en Ensenada visitó la redacción de El Editor Platense para hablar sobre su camino en el fútbol profesional. “Llegué con 16 años y a los seis meses ya estaba en Primera. Fueron años de crecimiento, con planteles y cuerpos técnicos increíbles. Camba me dio mi primer sueldo, me hizo profesional”, recordó con gratitud. Entre los momentos más memorables está el partido de Copa Argentina contra Lanús, donde entró a los 73 minutos: “Fue una fiesta. El banderazo, el vestuario, enfrentar a jugadores como el Flaco López o Aude. Dimos todo y el hincha lo reconoció”.
El paso de su hermana, Pilar, como kinesióloga del club durante la pandemia, también dejó una huella. “Ella entró por su profesionalismo, no porque fuera mi hermana. El cuerpo técnico y el plantel la trataron como una más, y eso fue hermoso”, destacó.
Iña no escatima en elogios para los técnicos que marcaron su carrera. Del Ruso Da Ponte guarda un recuerdo imborrable: “Era una grandísima persona, un amigo. Nos trataba a todos por igual. Su pérdida fue un golpe duro, pero nos unimos como grupo para salir adelante, jugando por él”. Sobre Palito Pereira, exjugador de clase mundial, destacó su humildad y enseñanzas: “Me daba tips que te hacían ganar un segundo en la cancha. Eso marca la diferencia de un jugador de élite”.
A pesar de las oportunidades en Europa, Berterretche no oculta su deseo de volver a Cambaceres. “El club está por encima de mí. Si me necesitan, siempre voy a estar. Sé que voy a volver a ponerme esa camiseta”, afirmó con convicción. Para él, el presente del Rojo, que busca recuperar protagonismo, requiere trabajo y paciencia: “Son momentos. Cambaceres es grande y necesita resultados, pero con trabajo y jugadores comprometidos, las cosas van a salir”.
Pocos lo saben, pero Iñaki estudió periodismo en la Universidad Nacional de La Plata, y hasta tuvo la oportunidad de trabajar en radio, cubriendo rugby para alejarse del fútbol y evitar conflictos por su cercanía con Cambaceres. “Me gustó mucho, fue una experiencia linda. Cubría los seis clubes platenses, cada fin de semana en una cancha distinta. El rugby me atrapó, aunque llegué sin conocerlo tanto”, confesó. Sin embargo, su amor por el fútbol siempre fue el motor principal. Desde los 16 años, cuando debutó en la primera de Defe, su carrera estuvo marcada por el esfuerzo y la profesionalidad, forjada en clubes como Estudiantes y Arsenal de Sarandí antes de consolidarse en Camba.
Además, el joven no esquivó la dura realidad del fútbol de ascenso en la Argentina. “Acá es diferente. Los gastos son altos, los contratos iniciales no alcanzan, y muchos tenemos que trabajar en otras cosas. Yo laburé en El Quijote de noche, tengo amigos que son barberos o hacen de todo para solventarse”, explicó. En contraste, su experiencia en Italia le mostró otra cara del fútbol: “Allá encontrás una tranquilidad que parece rara. El jugador de ascenso vive a mil, siempre corriendo”. Pese a las ofertas para continuar en el exterior, la “garra” del fútbol argentino y el deseo de estar cerca de su familia y amigos lo hacen considerar un regreso.
Hoy entrenando con el grupo principal de ADIP de la Liga Amateur Platense, Berterretche espera por un llamado de algún club, soñando con la posibilidad de llegar en algún momento a la Primera del fútbol de AFA.