El Celeste lo ganaba en Berisso, pero tras una cuestionable actuación del árbitro se tuvo que conformar con un empate
Por la sexta fecha del Torneo Apertura en la Primera B Metropolitana, Villa San Carlos igualó 2-2 frente a Argentino de Quilmes en el Estadio Gennacio Sálice. El conjunto berissense comenzó el partido de gran manera, pero finalmente terminó sufriendo un gol sobre el cierre y perdió dos puntos.
En el primer cuarto de hora, la Villa convirtió dos goles y parecía que el equipo dirigido por Pablo Miranda se iba a llevar el triunfo con tranquilidad. Sin embargo, antes del descanso la visita llegó al descuento y le puso suspenso al desarrollo de cara al complemento.
Poco a poco, quien empezó a tomar mayor protagonismo en el partido fue el árbitro Jonathan De Oto, que comenzó a sancionar faltas polémicas en contra del local y a cargar de amarillas al equipo. En total, el Celeste terminó el encuentro con ocho futbolistas amonestados.
Lo más escandaloso llegó a falta de menos de 10 minutos, cuando Tomás Akimenco fue al suelo y le sacó lícitamente la pelota a un rival dentro del área. Allí, el juez decidió sancionar penal, aunque finalmente el arquero villero pudo detener el remate y mantener la ventaja parcial.
Al final del encuentro, con el empate consumado, hubo mucha bronca por parte de los jugadores de San Carlos, quienes nuevamente se vieron perjudicados. Vale destacar que el equipo había perdido el invicto la semana anterior frente a Villa Dálmine con otro papel cuestionable del colegiado.
Lo cierto es que, pese a lo ocurrido en los últimos dos partidos, Villa San Carlos continúa en la cima de la tabla de posiciones, aunque ahora compartiendo el lugar con Real Pilar. El próximo compromiso será en condición de visitante frente a Argentino de Merlo.