Docentes, estudiantes y miembros de la comunidad educativa de la Escuela Manuel Belgrano, ubicada en calle 9 y 38, realizaron un abrazo simbólico frente al establecimiento en repudio a las agresiones sufridas la semana pasada por parte de familiares de alumnos.
El incidente que motivó la protesta ocurrió cuando un grupo de padres ingresó al colegio de La Plata tras una pelea entre estudiantes y, en un contexto de extrema tensión, increpó violentamente al personal docente, intentando agredir a una preceptora y a la directora.
La actividad reunió a docentes, estudiantes y familiares frente al edificio escolar. En un comunicado difundido previamente, la comunidad educativa señaló que lo ocurrido “no es un hecho aislado, sino el resultado del ataque continuo que desde gobiernos y medios de comunicación se realiza contra la escuela pública y los docentes”.
Además, denunciaron un “proceso sostenido de desfinanciamiento del sistema educativo” que agrava las condiciones de trabajo y aprendizaje.
Los manifestantes reiteraron su compromiso con la defensa de la educación pública y exigieron medidas concretas para garantizar la seguridad en el establecimiento.
Alumnos de la Escuela Manuel Belgrano de La Plata realizaron una sentada contra un directivo
El reclamo sucedió en las primeras horas de la mañana, en la puerta de la Escuela Manuel Belgrano, ubicado en avenida 38, entre las calles 8 y 9, La Plata. Allí, varios alumnos se congregaron para reclamar por la restitución de un directivo, el cual tendría varias denuncias por las cuales fue apartado de su cargo en su momento.
Según informaron miembros del centro de estudiantes de la escuela a El Editor Platense, este hombre encerraba con llave a chicas en la oficina de vicedirección, les gritaba y maltrataba. Por este motivo, se pegaron varios carteles sobre las paredes del establecimiento educativo, algunos de los cuales decían "queremos estudiar tranquilos", "la autoridad se ejerce con sabiduría, no con autoritarismo" o "queremos venir a la escuela sin miedo".
Por otra parte, los estudiantes reclaman que las denuncias hacia el directivo desaparecieron, mientras que desde la institución argumentan que no recibieron ninguna de manera formal.