Con el auge de las distintas plataformas, el acceso al mercado musical está tan solo al alcance de un clic. Se sabe que ahora es mucho más fácil conocer los hits del momento. Sin embargo, no podemos negar que los clásicos resisten, la nostalgia siempre gana… y las tiendas de discos se niegan a morir.
En Diagonal 73 a la altura de calle 16 se alza un espacio en el que se ha ido transformando a través del tiempo, pero conservando su esencia: llenar de ritmo y color la comunidad. Gustavo Valdovinos, quien alguna vez fue DJ y ahora es dueño del local, nos recibe amablemente. Pese a tener 68 años y coleccionar música desde los 15, todavía se puede observar el brillo en sus ojos al hablar de sus artistas favoritos.
“Cuando comencé con la tienda me decían que estaba loco, porque en el barrio había uno que vendía pollos y gallinas en la esquina, otro que tenía un kiosco, y yo decidí vender CD’S”, dijo a El Editor Platense sobre los inicios de Beat, espacio que inauguró en los 90 y se convirtió en ícono de la zona.
Aunque inició solamente con CD’S, posteriormente incorporó vinilos. De hecho, junto a un círculo de coleccionistas formaron una feria que se presenta al menos dos veces al mes en distintas partes de la ciudad, siendo esta una muestra más de la reinvención del sector para ser más cercano al público.
Con un grupo de amigos hacemos una feria de vinilos cerca de Meridiano V, es el San Telmo de La Plata, y explota mucho. Aparte de discos también vendemos remeras de bandas, comida y más, porque se arma todo un circo alrededor. La música arrastra un montón de cosas”.
El especialista en el rubro comentó que, contrario a lo que se piensa, los jóvenes siguen a la vanguardia en el consumo de los CD’S; vinilos; etc. También indicó que las mismas ganas de descubrir los llevan a adentrarse en un mundo lleno de distintos estilos, contrastes y melodías.
“La gente grande es medio reticente, te dice: ‘Yo ya no compro más esto, llevo toda mi vida comprando eso’, y cosas así. En cambio los jóvenes vienen con ganas de descubrir cosas, por ejemplo, el otro día vino una chica de 17-18 años a buscar el vinilo de Soda Stereo”, detalló.
A su vez, relató que uno de los hechos más destacados de estos años es que “resurgió el cantante histórico”. “La gente joven redescubrió a Elvis Presley; Michael Jackson; Luis Alberto Spinetta; Charly García… Charly no se deja de vender nunca”, expresó.
En la disquería se pueden encontrar producciones de distintos intérpretes, que van desde la salsa hasta el rock. A pesar de eso, Valdovinos resaltó que “la música es infinita”, haciendo “imposible tener todos los álbumes de todas las bandas legendarias. De Pink Floyd, ¿Cómo hacés?”.
Gustavo hace el intento de cubrir la demanda y así seguir afianzándose en las nuevas generaciones, ya que, sin lugar a dudas, está instalado en el barrio y su nombre resuena entre los vecinos.