Gimnasia y Esgrima La Plata presentó a su nuevo entrenador ayer, y ahora queda ponerse manos a la obra en el mercado de pases. Después de levantar la inhibición por Spinelli, situación en la que ya trabaja la CD de Mariano Cowen, el Lobo intentará cumplir los pedidos de Alejandro Orfila de cara al Torneo Clausura.
Más allá de los pedidos del técnico, la dirigencia albiazul tiene especial interés por volver a contar con dos ex triperos, por los que ya negocia. El primero, es el de Cristian Tarragona. Si bien Orfila no solicitó la contratación de un centrodelantero, en el Lobo se intentan anticipar a lo que puede venir.
Es que, de llegar una buena oferta por Rodrigo Castillo, probablemente sea aceptada. Por eso, la directiva ya se contactó con el actual jugador de Talleres. Le hicieron saber que no podrá percibir el mismo salario que en el club cordobés, pero que lo desean contar. Y ante la respuesta a priori positiva, sólo queda formalizar.
Por qué otro jugador puede avanzar Gimnasia a la brevedad
El otro nombre que maneja la dirigencia es el de Rodrigo Saravia. Orfila pidió un jugador con características similares a las del uruguayo, que recibió una buena noticia en las últimas horas: ante la situación de conflicto bélico que atraviesa Rusia, el jugador obtuvo la libertad de acción de su pase.
Gimnasia, que le hizo saber su interés incluso desde enero, también fue claro al indicar que no pondría dinero para su llegada. Pero al quedar libre, la negociación sería directamente con el futbolista uruguayo, que ya adelantó sus ganas de volver al fútbol argentino.
Así las cosas, puede ser cuestión de días para que el Mens Sana pueda cerrar dos refuerzos, viejos conocidos, y que se pongan a trabajar en la parte más intensa de la pretemporada. El Lobo intenta acelerar por dos refuerzos.