Gimnasia y Esgrima La Plata ha quedado en el debe, en otro semestre más. El Lobo terminó su participación tanto en el Torneo Apertura como en la Copa Argentina y los números no fueron para nada positivos. El Mens Sana fue uno de los equipos que más perdió y que menos ganó. Pero además, falló en las áreas.
Es que también fue uno de los equipos que menos goles marcó, con 11, y uno de los equipos más goleados, con 19 sufridos en contra. Lo cual marca, una falencia grave en los aspectos tanto ofensivo como defensivo. Donde se deciden los partidos, el elenco albiazul falló.
Hablando del área propia, vale destacar que entre Nelson Insfrán y unos pocos minutos de Luis Ingolotti, sólo lograron mantener la valla en cero en 7 de los 18 partidos totales. Menos de la mitad de las veces. Si bien no hay participación sólo de los arqueros a la hora de defender, está claro que así es difícil sumar.
En el área rival, también estuvo el déficit. Sólo 11 goles a favor, repartidos entre Castillo (5), Morales (1), Castro (1), Garayalde (1), Merlini (1), De Blasis (1) y en contra (1). El tripero ni se acercó al promedio de un gol por partido. Muchos partidos, incluso los perdió sin poder marcar. De forma contundente.
Si bien el ataque es donde más se buscó alternativas, ningún entrenador pudo dar en la tecla. A Gimnasia le faltó mucho gol, producto también de las deficiencias en el armado del juego. En eso, y también para ayudar a defender, no se pudo consolidar un mediocampo firme. Quizás, aquí, el problema albiazul más grave del semestre. Así, todo se torna complicado.
Qué buscará el Lobo en el mercado de pases
Lo primero que hay que marcar, es que la búsqueda dependerá de las exigencias del nuevo entrenador, y su manera de jugar. Pero puertas adentro, la Comisión Directiva no piensa en grandes erogaciones para reforzar el plantel. Se intentarán aprovechar oportunidades de mercado.
En el caso de que no haya salidas por venta dentro del equipo titular, la CD piensa en un defensor central, un volante central posicional, un interno creador de juego y un delantero. Claro está, el panorama está sujeto a qué evalúe y pida el nuevo entrenador: hoy por hoy, la prioridad pasa por saber quién conducirá al plantel desde junio.