La titularidad en Brasil de Lucas Alario no tuvo la prestación deseada por los hinchas. El delantero fue reemplazado y no encuentra su mejor versión
La llegada de Lucas Alario a Estudiantes de La Plata en enero pasado despertó gran expectativa en los fanáticos del elenco pincharrata. Un delantero campeón de la Libertadores con River y con recorrido europeo ilusionó de gran forma al mundo albirrojo, pero eso quedó en un deseo.
Más allá de que todavía el delantero puede revertir este flojo presente, la decisión de Eduardo Domínguez de ponerlo en cancha en la derrota con Botafogo en Brasil generó controversia, ya que el rendimiento en sus últimas apariciones no habían sido positivas.
Es más, el nivel es tan flojo que el Barba decidió por tirar a la cancha a Luciano Giménez en otras ocasiones -punta con otras características-, pero que en el complemento frente al Fogao en su ingreso dio la talla y en pocos minutos le cambió la cara al ataque del León.
Alario tiene contrato con el León hasta diciembre y si su nivel sigue así, difícilmente pueda continuar vistiendo la roja y blanca en el 2026. El entrenador lo ha bancado públicamente en varias oportunidades y destacó: "Sabemos de la jerarquía que tiene". El tiempo dirá si puede encontrar su mejor versión y aportar ese plus a un equipo que lo necesita.