El pedido fue solicitado luego de hallar pruebas que no fueron aportadas en la causa inicial, que investiga la muerte de Maradona
"Justicia x Dios", dice la bandera acompañada por una imagen de Maradona
En el marco del juicio que investiga la muerte de Diego Armando Maradona, se encontraron irregularidades en los análisis clínicos, por lo tanto, los los jueces que integran el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 3 de San Isidro ordenaron allanar la Clínica Olivos, ubicada en Vicente López, lugar donde el Diez se operó previo a su muerte.
En el pedido se estableció secuestrar todos los archivos relacionados con la salud del exfutbolista, con fecha entre el 3 y el 11 de noviembre de 2020, con el fin de obtener los registros informáticos en soporte papel y magnético de toda la documentación existente del tratamiento e internación de Maradona. Esto se realizó "en virtud de considerar que hay pruebas que involucran a los imputados que no fueron aportadas en la causa", detallaron al respecto.
Cabe resaltar que durante el operativo, también buscaban incautar documentación sobre otros procedimientos que se practicaron en la Clínica durante el período establecido. La petición tuvo lugar luego de la declaración del director del sanatorio, Pablo Dimitroff, quien aportó un estudio prequirúrgico que le habrían realizado a Diego antes de su operación de cabeza, a principios de noviembre de 2020. Sus resultados, sin embargo, no constaban en el historial clínico aportado en la causa.
El personal de la Dirección de Cibercrimen al ingresar a la Clínica se encontró con el médico a cargo, Dr. Juan Molinos; el Gerente de la clínica, Sr. Pablo Castiello; y el apoderado de Swiss Medical, Sr. Claudio Gabriel Ravinovich, quienes fueron interiorizados de la diligencia y autorizaron el acceso a los sistemas informáticos.
De esta manera, luego de un exhaustivo análisis, los agentes incautaron 279 fojas correspondientes a la historia clínica completa de Diego Maradona, seis estudios de laboratorio y 543 correos electrónicos que se enviaron entre los investigados.
En tanto, el fiscal general adjunto de San Isidro, Patricio Ferrari, solicitó también que se aporten las comunicaciones que hubo en el período mencionado, entre el equipo médico del sanatorio y la coordinadora de la medicina prepaga, Nancy Forlini, que está imputada en este juicio.
“Es prueba que involucra a los imputados. Este es el único modo en el que puede obtenerse esa prueba sin poner en riesgo el éxito en la búsqueda de la verdad”, aseguró.