El Gobierno nacional, a través del ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que eliminará las retenciones para el 88% de los productos industriales, con el objetivo de evitar que se desincentiven las ventas al exterior, recordando que en 2024 representaron unos USD 3.804 millones.
A través de un comunicado en su cuenta de X, lo adelantó el argumentando que “la medida beneficiará inicialmente a 3.580 empresas, casi el 40% de las que exportan en Argentina". Con esto, se busca bajar "impuestos distorsivos": "El ordenamiento de las cuentas públicas hace posible continuar bajando impuestos distorsivos. En esta línea, en enero de 2025, la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía eliminó los derechos de exportación de actividades agroindustriales de las economías regionales y sus cadenas de valor como la textil algodonera, papel, cartón, alimentos y bebidas, además de reducir las retenciones a los principales productos agropecuarios", recordó Caputo al respecto.
Según mencionó, para la gestión las retenciones “afectan la competitividad de las empresas argentinas en el exterior y las desincentivan a exportar”. Por eso, desde ahora, solo pagarán los Derechos de Exportación algunos sectores de insumos básicos como hierro, acero, aluminio y también la industria petroquímica y la automotriz.
Es importante nombrar que entre los productos que sí están incluidos, aparecen agropartes, productos de fundición, maquinaria agrícola, óptica, vidrio, autopartes, maquinaria y equipo, relojería, preparados de sangre u hormonas elaborados por la industria farmacéutica, como tubos, cables e insecticidas, cosméticos, partes de motores, plásticos y metales, entre otros. “De ahora en más, 4.411 productos no tendrán que pagar retenciones de entre el 3% y el 4,5% sobre el valor de la mercadería”, recalcó el Ministro.
La reacción de los exportadores
Previo al anuncio del titular de la cartera de Economía, la Unión Industrial Argentina (UIA) había detallado que estaban trabajando con el Gobierno para eliminar dichas retenciones a las exportaciones de las pymes. Fue en el acto donde asumió Martín Rappalini como presidente de la entidad, que resaltó la importancia de la quita de retenciones: “La mejora para las condiciones de exportación de las pymes industriales implica que se les quite entre 3% y 5% de derechos, lo que implica una mejora importante a nivel de la microeconomía, pero un bajo impacto fiscal".
Luego de conocerse la decisión del Gobierno, desde la UIA manifestaron que “es una muy buena noticia”, ya que “va en la dirección correcta de mejorar la competitividad argentina para incentivar la exportación al dejar de exportar impuestos y aliviar parte de la carga fiscal directa a parte del sector industrial exportador”. Todo esto, teniendo en cuenta que Argentina es uno de los pocos países del mundo que “grava con impuestos directos sus exportaciones industriales”, dijeron en la institución.
Asimismo, agregaron que se trata de una medida que “resulta clave que se complete en una próxima etapa eliminando las retenciones que quedaron vigentes en los sectores exportadores de insumos industriales estratégicos como acero, aluminio e industria petroquímica, y de la industria automotriz, que de conjunto representan más del 80% de las exportaciones MOI”.
Por otro lado, desde la Cámara de Exportadores de la República Argentina (CERA), se pronunciaron al respecto, destacando que “se trata de un paso fundamental tras más de una década de caída sostenida en las exportaciones industriales y frente a una preocupante merma en la participación de las pymes exportadoras, que actualmente se encuentra por debajo del promedio de los países menos desarrollados”.
“Además, llega en un momento clave, en un escenario internacional complejo y exigente, donde no hay margen para cargar las exportaciones con impuestos adicionales”, agregaron y mencionaron que el costo fiscal es “moderado” y que con la decisión de Caputo se produce “un avance importante para la competitividad del sector”.
“Si bien aún persisten desafíos, tanto en la eliminación total de derechos de exportación como de otros tributos que afectan la competitividad externa, queremos resaltar la corrección del rumbo y el cumplimiento de compromisos asumidos por parte del Gobierno, elementos centrales para recuperar el dinamismo exportador argentino”, cerraron.
Cabe recordar que las retenciones industriales fueron reintroducidas en 2018 bajo el gobierno de Mauricio Macri, como parte de un ajuste fiscal. Desde entonces, distintos sectores venían reclamando su eliminación, argumentando que afectan la competitividad y desincentivan la inversión.
De esta manera, la eliminación de retenciones para la mayoría de los productos industriales representa un giro significativo en la política fiscal argentina, en línea con los reclamos históricos del sector exportador. La medida es celebrada por cámaras empresarias como un avance hacia una mayor competitividad, especialmente para las pymes, aunque aún persisten desafíos para sectores estratégicos que seguirán gravados. En un contexto de caída sostenida de las exportaciones industriales y con un escenario internacional desafiante, el alivio fiscal podría marcar el inicio de una recuperación si es acompañado por estabilidad macroeconómica y políticas de fomento productivo a largo plazo.