El histórico centro cultural sufrió pérdida totales en el primer piso, quienes habitan el Olga Vázquez aseguran que fue intencional
Durante la noche del lunes, un Centro Cultural de La Plata sufrió feroz incendio, que destruyó parte de sus instalaciones. Se trata del Olga Vázquez, que está ubicado en Avenida 60 entre 10 y 11, un lugar que recibe a cantidad de artistas, feriantes, talleristas y emprendedores a diario y que ahora, necesita ayuda para poder seguir funcionando.
Según informaron a través de sus redes sociales, no tienen dudas de que "fue intencional". El foco estuvo en el primer piso, donde funciona un taller textil, hay baños y un aula de las personas que brindan cursos. Por fortuna, nadie resultó herido pero los daños materiales son considerables.
"Necesitamos reconstruir el primer piso, hacerlo habitable y seguro", informaron desde el espacio, por eso, reciben donaciones de materiales para empezar a trabajar en la instalación eléctrica, la cual hay que realizar desde cero. También es bienvenido el aporte de dinero "para que podamos costear los gastos de la reconstrucción y reposición de las herramientas de trabajo de nuestros talleristas".
Entre los elementos perdidos, detallaron que hay piso de tatamis, instrumentos musicales como bajo y guitarra, un amplificador, equipo de sonido, como así también vestuarios. Por otra parte, contaron que harán jornadas de trabajo "para quienes quieran poner el cuerpo y acercarse a dar una mano" en la limpieza y puesta en valor del lugar.
Quienes habitan y organizan el espacio, aseguraron que el "centro cultural experimentó la consecuencia de una cultura machista y de violencia de género. El incendió que sufrimos en el primer piso (...) fue intencional. Por suerte nadie resultó herido".
En ese sentido, recordaron que "el Olga es un espacio recuperado y autogestivo. Es refugio de asambleas, de estudiantes y profesores, de quienes eligen trabajar sin patrón, de cultura popular y desviada, guarida de la disidencia y trabajadores culturales; lugar dónde los barrios de las periferias se hacen presentes. El Olga es refugio de quien lo necesite, de les excluides y siempre que fue necesario supo ser el espacio para ayudar a otres".
Al respecto, expresaron: "Hoy nos toca a nosotres pedir su ayuda. La de quienes habitaron en algún momento el Olga, de quienes vinieron a algún taller, a una fiesta, a un reci, al Jauría, a tocar, cantar o actuar, a una feria o a una varieté".
ALIAS: aporteolga
(a nombre de Sofía Franci)
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