El viernes el centro platense fue el escenario de un siniestro episodio, cuando un hombre se tiró desde el balcón de La Serena, ubicado en el piso 12 del Hotel Dazzler. Después de almorzar y tomar tres botellas de agua, pidió perdón y se arrojó al vacío.
Sin embargo, la falta de control y el peligro que esto representa abrieron varios interrogantes: ¿El lugar cumplía con las normas? ¿Quién controla el lugar? ¿Se podría haber evitado? No hay que pasar por alto el hecho de que, de milagro, ningún peatón que pasa por allí resultó herido.
“La habilitación la llevó adelante la gestión de Garro”, aseguraron fuentes consultadas por este medio cuando se preguntó si el lugar cumplía con las normas de seguridad necesarias, ya que las barandas de los balcones de restaurantes, bares y cafés deben tener una altura mínima.
Además de las normativas del COU, existen reglamentaciones adicionales sobre la habilitación de comercios que involucran normas de seguridad y accesibilidad, y en nuestra ciudad fuentes aseguraron que deben tener entre 0,90 y 1,20 metros.
“La verdad que lo que ocurrió fue una tragedia, yo no sé si cumplen con las medidas de seguridad. Fue delante de todos ¿Qué pasa si un nene se sube? Nadie controla nada”, aseguró un vecino que estuvo consternado por el hecho que revolucionó a los turistas y personas que pasaban por la zona.
Esto además pone en foco la siguiente cuestión: ¿Está bien pensada la norma que establece estas reglas? ¿Quiénes se hacen responsable ante lo sucedido, quién controla? ¿Qué ocurría si un peatón resultaba herido?
Cabe recordar que testigos que dialogaron con este medio aseguraron que la víctima almorzó en La Serena, ubicado en la terraza del Hotel Dazzler, y tras pagar la cuenta, "miró a los presentes pidió perdón, se despidió y saltó al vacío". Además, contó “pidió comida, tres botellas de agua y pagó todo antes de lanzarse”.
En tanto, el hombre de 40 años, identificado como Manuel Giannoni, era vocalista y guitarrista de la banda "Manu y los Satélites de Oro", así como también productor de contenidos turísticos. Su cuenta de Instagram reflejaba su amor por la música, los talleres de yoga y su pasión por explorar el mundo.
"Que tristeza amigo", "Descansá en paz", "Manu querido no lo puedo creer! Gracias por la música y tus canciones hermosas!", "Chau Manu, donde estés harás de ese, un lugar mejor" , fueron algunos de los mensajes que dejaron amigos y allegados en sus redes sociales.
En caso de ser necesario la asistencia telefónica gratuita a personas en crisis o con riesgo de suicidio existe la línea 135 desde Buenos Aires o bien el 011-5275-1135 ó 0800-345-1435 desde todo el país.
FOTO DE PORTADA: Marina Espeche