La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) volverá a percibir impuestos a los sellos y a las patentes a través de los Registros del Automotor, tras una decisión judicial que revocó la medida cautelar que había frenado este mecanismo de cobro. La resolución, dictada por la Cámara Federal de La Plata, habilita nuevamente a los registros seccionales a actuar como agentes de percepción de tributos provinciales.
Durante meses, el cobro había quedado suspendido luego de que el Ministerio de Justicia de la Nación promoviera una acción para declarar inconstitucional la facultad de ARBA de recaudar impuestos en esas dependencias. Sin embargo, los jueces consideraron que no existía un peligro real en la continuidad del sistema y destacaron que se trata de un procedimiento que funcionó durante más de tres décadas sin entorpecer la actividad registral.
El tribunal también remarcó que frenar el cobro representaría un perjuicio significativo para las finanzas bonaerenses, mientras que no se acreditó un daño concreto para el Estado nacional. En ese sentido, la decisión refuerza la validez del Código Fiscal provincial, que establece que los Registros del Automotor deben informar sobre incumplimientos fiscales y garantizar que se abonen los tributos correspondientes antes de concretar las inscripciones.
Las consecuencias en La Plata del fallo a favor de ARBA
Con este fallo, ARBA recupera una herramienta clave para mejorar la recaudación. A partir de ahora, quienes realicen trámites vinculados con automotores en territorio bonaerense deberán volver a regularizar el pago de impuestos de sellos y patentes en los mismos registros, lo que permitirá a la provincia recomponer ingresos y asegurar el cumplimiento de sus obligaciones tributarias.
La medida marca un nuevo capítulo en la disputa entre Nación y Provincia por las competencias en materia de recaudación, y al mismo tiempo devuelve previsibilidad a un esquema que había quedado en suspenso por la judicialización del tema.