Frentistas de Villa Progreso, Berisso, hicieron llegar su malestar con una obra que los aisló completamente y enumeraron las complicaciones que les trajo
Los vecinos del barrio Villa Progreso de Berisso piden respuestas al municipio por una obra que se está realizando en la calle y que impide que puedan llevar adelante su vida con normalidad. Asimismo, resaltaron que no fueron avisados sobre la misma, hecho que despertó profundo malestar en el barrio.
Según informaron a El Editor Platense, la construcción está en las calles 123 desde 17 hasta 22 (ex 76 y 81) y los vecinos que habitan en ellas y las respectivas arterias transversales "están cautivos". Al encontrarse con las máquinas se comunicaron con la Municipalidad de Berisso para que brinden detalles al respecto, pero afirman que no "no pueden dar respuesta por las consecuencias de la obra".
En esa línea, indicaron que "no han sido informados de la obra y no existe ningún cartel que informe el comienzo de la misma". Los frentistas aseguraron que que los empleados de la constructora "estacionan sus maquinarias y camiones obstruyendo las entradas de los garajes, sin pedir autorización; como así también, ubican sus baños químicos sobre la veredas".
Por otra parte, "abrieron una zanja en el medio de la calle 123 para colocar un caño de gran diámetro y una vez que la tapan, dejan la calle sin nivelar", mencionaron.
Según informaron, la obra sería del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires pero hasta el momento no saben específicamente qué están haciendo. Hoy, miércoles 14 de mayo, "comenzaron a romper el asfalto que pagaron los vecinos en la década de los '70 y que por allí, pasan los caños de cloacas, agua corriente y gas, con la preocupación de que rompan alguno de estos suministros".
"Están vaciando las napas de agua y dejando que se derrame en forma constante varios litros hacia la calle 21; destruyeron veredas; no puede pasar el camión recolector de basura; tiemblan las casas por el movimiento de suelo, el ruido molesto es constante; no tienen en cuentan los árboles plantados en las veredas; los peatones no pueden transitar porque el lugar no sólo está embarrado, sino que también está vallado varios metros", enumeraron los vecinos al respecto.
"Los autos no pueden circular, no llegan ni taxis, ni remises; si se necesitaría una ambulancia tampoco podría circular. Dato no menor, es un barrio con un alto porcentaje de personas adultas mayores con problemas motrices", detallaron, mostrando que es una obra que los deja completamente aislados y de la cual no tienen conocimiento sobre si les va a beneficiar en algo o no.
"También hay que tener en cuenta que es una zona inundable y si lloviera en estos momentos sería un caos. La comunidad se pregunta quién se va a hacer cargo de todas estas problemáticas", concluyeron.