Virginia Franco, una reconocida psiquiatra de La Plata, fue asesinada días atrás en su vivienda de City Bell, desde entonces, la investigación no cesa debido a que no hay sospechosos y el móvil del crimen sigue siendo una duda. Mientras tanto, el fiscal Álvaro Garganta de la UFI N°11 trabaja en la hipótesis de un homicidio en ocasión de robo.
En ese sentido, con el fin de obtener otros datos sobre el momento en el que murió Franco, se ordenó una ampliación de la autopsia al cuerpo, para poder precisar el mecanismos, las circunstancias y el momento en el que se dio el crimen brutal.
Vale recordar que los primeros resultados arrojaron que la psiquiatra murió entre 10 y 12 horas antes del hallazgo del cuerpo, es decir, entre la tarde y la noche del viernes en su casa de calle Cantilo, entre 15A y 17. Como informó El Editor Platense, la mujer tenía un golpe en la cara y un corte en el cuello que alcanzó una arteria que hizo que perdiera gran cantidad de sangre, lo que le provocó la muerte, lo que se conoce como shock hipovolémico. Además, tenía signos de defensa en sus manos.
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De esta manera, los investigadores buscarán achicar el margen que hay en el horario de muerte para poder rastrear movimientos de la víctima y también de posibles sospechosos. A través de cámaras de seguridad privadas y públicas en el barrio intentarán reconstruir la tarde-noche trágica y evidenciar si hubo sospechoso y/o movimientos extraños.
En los primeros momentos se demoró a un amigo de Franco, quien encontró el cuerpo en un charco de sangre y dio aviso al 911. Pablo Adrián Bozza mantenía una relación estrecha con la psiquiatra y se había acercado tras no poder contactarse con ella. Incluso trascendió que es quien administraba algunas de sus cuentas bancarias, un dato que los investigadores consideraron relevante al principio.
Sin embargo, con el pasar de las horas, el hombre colaboró con la causa y se descartó como sospechoso. Ahora, el dato que genera alarma es que, de la vivienda de la profesional, lo único que se llevaron fue el celular, además de que las puertas no estaban forzadas. En la vivienda estaban los dos autos, una notebook, televisores y demás objetos de valor, por lo que sería extraño que la hayan matado sólo para robarle el celular, por eso, crece cada día más la investigación para determinar lo sucedido.