El Gobierno Nacional publicó este domingo un duro comunicado contra la República Islámica de Irán, en medio del conflicto con Israel que tiene a todo el mundo en vilo. A través de la Oficina del Presidente (OP), Javier Milei rechazó la designación de Ahmad Vahidi como Comandante de la Guardia Revolucionaria Islámica.
Es que Vahidi es uno de los nombres que el cíclicamente resucitado fiscal Alberto Nisman mencionaba en la investigación del atentado a la AMIA en 1994. Según expresa el comunicado de la OP "Vahidi encabezó la mesa de decisiones que evaluó y aprobó la propuesta de atacar en suelo argentino".
Con ese antecedente, el gobierno libertario considera el nombramiento de Vahidi como "una provocación inaceptable de la República Islámica de Irán hacia nuestro país". De esta manera, la posición de Argentina en el conflicto que observa con atención todo el mundo ya está marcada. Desde el país asiático, hasta el momento, no hubo una respuesta oficial.
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Las relación de Argentina con Irán
Con el recuerdo de los atentados a la AMIA y a la Embajada de Israel en la década de 1990 grabados a fuego en la memoria argentina, la posición del Gobierno ante la nueva escalada de violencia en Asia Occidental vuelve a poner a nuestro país en un lugar de suma fragilidad. Expertos aseguran que Hezbollah mantiene redes subterráneas en el país, y presencia histórica en la Triple Frotera. Sin embargo, la posibilidad de un atentado en suelo argentino no es vista como una posibilidad, al menos en el corto plazo.
Aunque a la vez, especialistas advierten: "El verdadero riesgo está en que Argentina no dimensione su rol simbólico en el conflicto Irán–Israel y no se prepare con protocolos serios de contraterrorismo, inteligencia preventiva y protección comunitaria".