Claudio Albini, uno de los principales acusados en el caso Chocolate Rigau, estuvo una semana internado en el hospital San Juan de Dios
Claudio Albini padeció un cuadro de anemia
El exsubdirector de personal de la Legislatura bonaerense y uno de los principales acusados en la ‘causa Chocolate Rigau', Claudio Albini, volvió a la alcaidía Roberto Pettinato de Lisandro Olmos tras permanecer una semana hospitalizado por complicaciones de salud.
Albini ingresó al hospital San Juan de Dios el pasado viernes y fue diagnosticado con un cuadro de anemia por lo que debió permanecer bajo cuidados médicos una semana. Previamente, informaron fuentes policiales, el hombre había pidió ir al área de sanidad de la unidad donde está detenido, debido a que se sentía desganado y su piel había tomado un color amarillo.
Allí le diagnosticaron la enfermedad y se mantuvo bajo cuidado dentro de la alcaidía, pero su cuadro empeoró y debió ser trasladado al nosocomio de calle 27. Finalmente, en las últimas horas retornó al predio policial de Ruta 36.
Cabe recordar que esta semana la Justicia bonaerense elevó a juicio la Causa Chocolate, por lo que Julio ‘Chocolate’ Rigau junto a Claudio y Facundo Albini serán juzgados por asociación ilícita y defraudación contra la administración pública.
La decisión fue confirmada el martes por el Juez de Garantías de La Plata, Federico Atencio. El magistrado rechazó varios pedido de las defensas y avaló el requerimiento que había enviado la fiscal Betina Lacki.
Tal como se viene informando, "Chocolate" Rigau enfrenta cargos por fraude y por formar parte de una organización delictiva. Fue detenido el 9 de septiembre de 2023 luego de ser sorprendido en un cajero del Banco Provincia (7 y 54, de La Plata) con 43 tarjetas de débito pertenecientes a empleados legislativos.
En ese momento tenía en su poder 49 tarjetas de débito pertenecientes a supuestos empleados de la Legislatura bonaerense, junto a 1.260.000 pesos en efectivo. Según consta en el acta policial, Rigau permaneció aproximadamente 20 minutos extrayendo dinero de forma consecutiva en los cajeros del banco. Su actividad fue advertida por un testigo presencial, quien dio aviso a la policía, lo que derivó en su detención en el lugar.