La víctima de 19 años se encontraba peleando por su vida tras sufrir un siniestro vial a bordo de su moto. Conmoción en Berisso por su fallecimiento
Paulo Mateo Ifrán, el motociclista fallecido en Berisso
FacebookTras luchar por su vida por más de dos semanas en una cama del Hospital Mario Larraín de Berisso, Paulo Mateo Ifrán, el joven de 19 años, finalmente falleció. El motociclista se encontraba con pronóstico reservado luego de haber protagonizado un siniestro vial en 165 entre 26 y 27, accidente que le provocó heridas irreversibles.
Su lamentable deceso fue confirmado por familiares y allegados al joven que, mientras se encontraba internado, habían pedido a través de oraciones por la salud de Paulo Mateo. Es más, durante estos 16 días, en las inmediaciones al nosocomio donde se encontraba el motociclista, se realizaron concentraciones con banderas y carteles que pedían su salvación.
En un sentido mensaje difundido por el Club La Ribera de Berisso, se expresó el dolor compartido por esta pérdida irreparable.
“Hoy es un día extremadamente triste para todos, ya que nos ha llegado la desgarradora noticia del lamentable fallecimiento de Paulo Ifrán. En este doloroso momento, deseamos hacerles llegar nuestro más sentido pésame y solidaridad desde lo más profundo de nuestros corazones”, compartieron en redes sociales.
La pérdida de Paulo generó un profundo dolor en su entorno. Tal como se mencionó, todos los amigos y familiares del joven estuvo unida en un gesto colectivo de amor y solidaridad que lamentablemente, no tuvo el desenlace deseado. Los mensajes de despedida reflejan el impacto que tuvo su vida, aunque corta, en quienes lo rodearon.
Desde días previos, amigos cercanos a Paulo, conocidos como “La Banda de Pauliito”, venían publicando mensajes de esperanza y unidad, reflejando el cariño que unía al grupo en torno al joven. En uno de sus posteos más emotivos, mencionaron: “Esto es una pausa, ya vamos a volver”, frase que -según sus allegados- Paulo solía decir y que mantenía encendida la llama de la esperanza.
Lamentablemente, esta batalla llegó a su fin, dejando un vacío inmenso entre quienes lo conocieron. “Dale gordo, no nos aflojes que te estamos esperando”, había sido uno de los tantos llamados de aliento que resonaron en redes sociales, junto a pedidos de oraciones para su pronta recuperación.